Las autoridades de EEUU han desmantelado una red de robo de datos por Internet que ha infectado a 2,3 millones de ordenadores con un virus conocido como Coreflood. A través de él se cree que los responsables, probablemente rusos, podrían haber robado más de 100 millones de dólares (más de 69 millones de euros).
En un comunicado conjunto del Departamento de Justicia con la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), las autoridades aseguran que se trata de la mayor operación llevada a cabo en EEUU contra una ‘botnet’, una red en la que piratas informáticos se hacen con el control de un gran número de ordenadores a través de virus que infiltran programas espía.