Dentro del amplio abanico del malware que encontramos en la actualidad, sabemos que uno de sus vectores de ataque en la gran mayoría de las ocasiones es el aprovechamiento de alguna vulnerabilidad en el software. Estas vulnerabilidades también conocidas como Bugs, afectan a todo el software afectado que tenemos en nuestro equipo. Por un lado tenemos al sistema operativo y por otro lado al software instalado (aplicaciones y servicios). Cuando un desarrollador de malware encuentra una vulnerabilidad en el sistema operativo o en las aplicaciones instaladas, trata de crear un programa que sea capaz de aprovechar esa vulnerabilidad (exploit) para poder acceder al sistema. Normalmente para instalar otro tipo de malware.

Cuando las empresas desarrolladoras de software descubren esa vulnerabilidad desarrollan las soluciones que cubran los fallos de seguridad (actualizaciones de seguridad o parches) y las hacen públicas para que los usuarios puedan aplicarlas en sus sistemas.

Desde Kwell se ofrecen servicios para cubrir las necesidades de cualquier usuario/pyme al respecto.

Ya que se trata de uno de los vectores de ataque más empleados por el malware, se debe poner especial atención en este problema con el objetivo de evitar ser infectado. Desde Kwell se trata de concienciar al usuario a través de recomendaciones y guías con el fin reducir esta problemática.