La polémica está servida después de que se estén registrando casos de empresas americanas que exigen a sus aspirantes a un puesto de trabajo que les proporcione los datos de acceso a su cuenta de Facebook.

Si hasta la fecha las pesquisas de los encargados de Recursos Humanos de las empresas se limitaban a revisar la información sobre un candidato que estuviera abierta a todo el público, ahora algunos quieren ir más allá.

 Un ejemplo de esa práctica se ha dado en una empresa de Nueva York, que pidió a uno de los aspirantes a un puesto de trabajo que les facilitara el nombre de usuario y contraseña de su perfil en Facebook cuando vio que este era privado, a lo que se negó el candidato, perdiendo por ello cualquier opción de salir elegido.

Independientemente del interés de las compañías por conocer a sus futuros empleados, conviene recordar que esa práctica va contra las condiciones de uso de la red social, ya que cuando un usuario se registra se compromete a no confiar sus datos de acceso a terceras personas.