Internet tiene una muy buena memoria. Y, si alguien sube una foto de su adolescencia que quizá no le favorece mucho, es prácticamente imposible borrarla de la red.
No solo tiene que ser una foto embarazosa. A lo largo de sus vidas las personas generan datos, información o videos que pueden hacerlos sentir incómodos en el futuro o ponerlos en una situación injusta que perjudica su reputación.
Por eso un grupo de activistas y parlamentarios presentaron en 2012 ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea una propuesta de ley que defienda el derecho a ser olvidado y obligue a compañías como Google y Facebook a borrar aquello que sus usuarios no quieren en la red.
La decisión está prevista para finales de este año. Pero mientras tanto, otro grupo de activistas está haciendo campaña para que se defienda algo en cierta medida opuesto: el derecho a ser archivado. (más…)



