Siempre me he quejado del abuso de las modas en ciberseguridad. Cada año una amenaza o riesgo se convierte en la conversación estrella y parece que es lo único que preocupa a las organizaciones. Se olvida todo lo demás y se invierte en productos o servicios que al poco tiempo quedan en el olvido.
Un caso extremo ha sido el de los ataques de denegación de servicio distribuidos o DDoS. Hace unos años eran el terror de las organizaciones y ahora la mayoría de responsables los han olvidado. Ya no son noticia de portada, ya no mueven tanto dinero, ya no dan tanto miedo.
¿Sera porque las organizaciones ya no son vulnerables a este tipo de ataques?
NO – La mayoría son igual de vulnerables que hace un par de años, unas cuantas han realizado inversiones en equipos o servicios para protegerse, pero muy pocas han entrenado y han puesto realmente en forma sus defensas.
Mientras tanto los “malos” si han mejorado sus técnicas y profesionalizado sus estrategias.
Los DDoS han seguido el proceso habitual de evolución de la mayoría de amenazas importantes a nivel de ciberseguridad. También las tecnologías de protección asociadas, aunque tal vez con un ritmo mayor del habitual: (más…)