El caso de una joven de 16 años que fue secuestrada por un comerciante en San Miguel, luego de pactar un encuentro a través de Facebook, volvió a poner en escena el reclamo de especialistas para agravar la pena de abuso cuando se haya utilizado un medio electrónico como elemento de captación. La figura no está legislada en nuestro país, donde 1,9 millón de menores usan esa red social.
El comerciante de 38 años concretó la cita con la menor el 21 de octubre a la salida del colegio, tras seducirla por Facebook. La convenció de ir a su casa, en La Tablada, donde la tuvo encerrada seis días. La Policía Bonaerense trabajó con un especialista informático y luego de rastrear los e-mails e indagar en el Facebook de la chica, descubrieron al hombre (J. C. M.), que tenía muy pocos contactos: eran todas menores de edad.